23/08/2024

La reproducción eficiente desde el punto de vista de la hembra

En el marco de la jornada técnica, el Dr. Sergio Kmaid, de la firma Tecnovax, habló sobre la eficiencia en la reproducción, pero en esta oportunidad desde el punto de vista de la hembra. En este sentido recordó varios conceptos, pero el principal, y que el productor ya conoce, es el impacto de la salud del rodeo en la fertilidad de los vientres.

Kmaid remarcó que la salud comienza “por la boca”, es decir que “la nutrición juega un rol fundamental” para lograr una condición corporal óptima de la vaca, que, sumado al examen reproductivo, él control de enfermedades reproductivas y la selección genética, permiten lograr una mayor eficiencia reproductiva.

Desde el punto de vista de las enfermedades, recordó que “el 50% de las pérdidas reproductivas están relacionadas con enfermedades infecciosas”, al respecto mencionó que es necesario “considerar la compra de animales de establecimientos cerrados, ya que adquirir ganado en ferias, de vecinos o de otras fuentes conlleva riesgos” en este sentido.

En cuanto a la fertilidad, “el objetivo primordial es lograr la preñez de vacas y vaquillonas y el destete de terneros sanos”. A pesar de estos objetivos, el profesional recordó que “para las vacas, especialmente en situaciones de restricción, lograr la preñez puede ser un lujo”. Por eso, es necesario balancear adecuadamente “las medidas que tomamos en cuanto a alimentación, manejo y tratamientos”.

El Dr. Kmaid, destacó la importancia de “aumentarla cantidad de vacas que paren al inicio de la temporada de partos”, que esta relacionado con la mejora en la tasa de preñez del primer servicio y para lograr este objetivo “los veterinarios jugamos un papel clave en este proceso” indicó. 

Entre los factores que influyen en las bajas tasas de preñez, el profesional señaló entre otros temas “el anestro”, que en nuestro país está relacionado con el postparto, la nutrición, la categoría y la edad de los animales. “Por ejemplo, las vaquillonas de primer parto tienden a tener más problemas que las vacas que ya han tenido dos o tres partos” indicó.

En el caso de las pérdidas reproductivas dijo que “pueden estar asociadas con factores alimenticios, genéticos, enfermedades infecciosas o incluso el manejo inadecuado”. En este sentido puso como ejemplo “las pérdidas asociadas con la garrapata y el uso de baños de inmersión, o la vacunación contra la fiebre aftosa que según trabajos recientes del Dr. Alejo Menchaca de INIA en Uruguay, podría estar vinculada a pérdidas reproductivas”.

Otro de los puntos esenciales en su presentación, fue la necesidad de “reducir las pérdidas gestacionales y periparto, ya que problemas como distocias o complicaciones en los partos pueden afectar la fertilidad” de los vientres en el futuro. Según el profesional “los objetivos de mejorar la fertilidad y reducir las pérdidas no son contrapuestos, sino complementarios”.

En este sentido remarcó que un manejo adecuado, especialmente en términos de alimentación durante el período de gestación, es una inversión con un retorno positivo. “Al alimentar correctamente a las vacas preñadas, se incrementan los pesos al destete, la fertilidad en las vaquillonas y la longevidad de los animales” agregó.

Kmaid remarcó que “restringir la alimentación de las vacas preñadas, particularmente entre los 45 y 185 días de gestación, puede afectar negativamente la fertilidad de sus crías, como lo demuestran estudios realizados en Estados Unidos”. Así como también se debe considerar el movimiento de animales, especialmente en los primeros días después de la inseminación, ya que esto puede aumentar las pérdidas reproductivas. “Investigaciones indican que mover ganado entre los días 6 y 42 post inseminación incrementa el riesgo de pérdidas” dijo el profesional.

En cuanto a la sanidad, recordó que existen problemas de “infertilidad entre el servicio y el tacto”, a lo que se suman los “abortos entre el tacto y la parición, y mortalidad perinatal entre la parición y el destete”. En este sentido dijo que “la mitad de las fallas reproductivas se deben a causas infecciosas, y muchas de ellas son prevenibles”.

El veterinario presentó en su charla, los resultados de un estudio realizado por el equipo de bacteriología del Ministerio de Agricultura, liderado por la Dra. Valentina Macchi, que arroja luz sobre la relación entre la leptospirosis y la infertilidad bovina.

“Si una vaca tiene títulos de anticuerpos contra leptospira mayores a 1 en 200, tiene un 30% más de probabilidades de ser menos fértil que una vaca sin esos títulos” indicó.

Este estudio también reveló que “las vacas con serología positiva a leptospira tienen un 40% más de posibilidades de infertilidad. Si aparecen entre 10 y 100 leptospiras en la orina las probabilidades suben 1,31, y si superan las 100, la probabilidad aumenta en un 1,34”.

Esto refuerza la importancia de la vacunación reproductiva. “Es esencial aplicar un esquema de vacunación adecuado, que incluya una primera dosis 45 días antes del servicio y una segunda 30 días antes del mismo, para permitir que la vaca o vaquillona desarrolle inmunidad” dijo Kmaid.

Sergio Kmaid

Dr. Veterinario en Tecnovax